Concepto de One Health (Salud única) desde una perspectiva espírita
Romina Romero
El concepto One health se comenzó a estudiar y considerar desde comienzos del siglo XXI, y propone el abordaje de tres ámbitos correlacionados: la Salud humana, la Salud animal y el Medio ambiente, de manera tal que las diferentes disciplinas a cargo trabajen al unísono, en una colaboración multisectorial y transdiciplinaria, para construir y defender una Salud única, a través de la resolución colaborativa de problemas a nivel local, nacional y global.
¿Cuáles son los hechos que han llevado a considerar la importancia de estas interacciones?
Contaminación y cambio ambientales: Tanto el calentamiento global como el cambio de hábitats favorecen las enfermedades zoonóticas (enfermedades transmitidas de animales a personas), considerando que el 60% de las enfermedades infecciosas humanas son de origen animal (salvaje o doméstico). Además, la expansión de la ganadería extensiva genera más gases de efecto invernadero que el sector transporte, sumado al elevado consumo de agua, contaminación de los suelos con heces de dicha ganadería y al uso indiscriminado de antibióticos que favorecen la extensión de bacterias multirresistentes a nivel global. Adicionalmente, la deforestación aumenta el contacto de la fauna silvestre con el ganado y las personas, con el consiguiente aumento del riesgo de transmisión de enfermedades, sobre todo en países y poblaciones de escasos recursos, más vulnerables a estas situaciones.
Movimiento migratorio de poblaciones: La rapidez y facilidad de interconexión de viajes internacionales, aumenta la posibilidad de una veloz diseminación de enfermedades y vectores, posibilitando el establecimiento de una emergencia sanitaria mundial en solo días, como la del SARS-CoV-2.
El Cuatripartito One Health, formado por la Organización Mundial de la Salud (OMS), la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO), la Organización Mundial de Sanidad Animal (OIE) y el Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA) ha desarrollado el Plan de Acción conjunta One Health, con el objetivo de tomar cartas en el asunto. A nivel europeo, a través del Programa Conjunto Europeo One Health (de 2017) refuerza el trabajo interdisciplinario de centros médicos, veterinarios y alimentarios. A nivel español, el Plan estratégico de Salud y Medio Ambiente (de 2021) plantea el trabajo sobre el riesgo derivado de factores ambientales y sus condicionantes, aplicando medidas para el control de enfermedades zoonóticas y resistencias antimicrobianas (1).
Evidencia de algunas de las consecuencias de los cambios en el medio ambiente es el aumento de casos de Arbovirosis (enfermedades transmitidas por mosquitos del género Anopheles y Cullex) en zonas que, hasta los últimos tiempos, no reportaban casos autóctonos. Ejemplo de ello puede verse en la provincia de Barcelona (España) donde, en el verano de 2023, se han reportado casos de Dengue en zonas como Malgrat del Mar y Reus (2).
Otro ejemplo es la pandemia del siglo XXI, el SARS-CoV-2, cuyo origen más probable es zoonótico… causado por un coronavirus con un reservorio animal, capaz de propagarse a los humanos, como sucedió con el coronavirus OC43 (siglo XIX) o MERS-CoV (en 2011). Esta pandemia sin precedentes puso de manifiesto la ausencia de un sistema de alerta precoz y de un trabajo interdisciplinar temprano, dejando dos advertencias importantes: el desconocimiento de mecanismos o factores involucrados en la aparición y la adaptación del virus, y por otro lado, las especulaciones sin bases científicas sobre el origen de la COVID-19. (3)
¿Pero cómo puede una perspectiva Espírita colaborar en este plan estratégico planteado a nivel mundial?
El Libro de los Espíritus (en Fragmento 540) nos aclara sobre la armonía general:
«Así todo sirve, todo se encadena en la naturaleza desde el átomo primitivo hasta el arcángel, que a su vez ha empezado por el átomo.» (4)
Todos somos seres en evolución: minerales, plantas, animales, humanos. Es nuestra responsabilidad velar por el progreso de las especies, y eso incluye la defensa de la biodiversidad y el desarrollo de la sustentabilidad.
Diferentes corrientes religiosas y espiritualistas han manifestado y siguen manifestando su preocupación por la conservación del medio ambiente, exhortando a sus seguidores a comprometerse con su responsabilidad ecológica.
Debemos colaborar con el Mundo de Regeneración que deseamos, que necesita la implicación de cada ser humano. Como participantes activos y directos de la construcción del mundo de regeneración, tenemos que comprometernos con los elementos que nos rodean, con los que estamos fuertemente interrelacionados.
Ya San Agustín, en el Capítulo III de El Evangelio según el Espiritismo (5) , nos comenta sobre los Mundos regeneradores…
«17. Los mundos regeneradores sirven de transición entre los mundos de expiación y los mundos felices. El alma que se arrepiente encuentra en ellos la calma y el reposo, mientras concluye su purificación. No cabe duda de que en esos mundos el hombre aún se encuentra sujeto a las leyes que rigen la materia. La humanidad experimenta sensaciones y deseos como los vuestros, pero está liberada de las pasiones desordenadas de las que sois esclavos.
… El hombre todavía es de carne y, por eso mismo, está sujeto a vicisitudes de las cuales sólo están eximidos los seres completamente desmaterializados. Aún tiene que sufrir pruebas, pero sin las punzantes angustias de la expiación. Esos mundos, comparados con la Tierra, son muy felices, y muchos de vosotros estaríais satisfechos de quedaros allí, porque representan la calma después de la tempestad, la convalecencia después de una cruel enfermedad.»
«18. No obstante, por desgracia, en esos mundos el hombre todavía es falible, y el espíritu del mal no ha perdido completamente su dominio. No avanzar equivale a retroceder, y si el hombre no se mantiene firme en el camino del bien, puede volver a caer en los mundos de expiación, donde lo esperan nuevas y más terribles pruebas. Contemplad, pues, esa bóveda azulada, por la noche, a la hora del descanso y la oración. Entonces, ante esas innumerables esferas que brillan sobre vuestras cabezas, preguntaos cuáles son las que conducen a Dios, y rogadle que un mundo regenerado os abra su seno después de la expiación en la Tierra.»
(San Agustín. París, 1862.)
En el libro Ideal Espírita (6), el Espíritu André Luiz nos dice:
«…Antes de que el hombre apareciera en la superficie del planeta, las plantas seguían las leyes existentes durante mucho tiempo. Como usuarios del Universo, sepamos que toda acción humana contraria a la Naturaleza constituye un camino hacia el sufrimiento. Aprendamos de los entornos naturales las lecciones que son esenciales para nuestras vidas. Somos interdependientes. No viviremos en paz sin construir la paz para los demás. Tenemos funciones específicas. Existimos para colaborar en el progreso de la Creación, construyendo el bien para todas las criaturas…»
Chico Xavier también tenía un profundo respeto hacia cada ser vivo que lo rodeaba. Tuvo tres perros: Lorde, Dom Negrito y Brinquinho, y siempre prodigaba un profundo cariño por sus plantas, sus flores… conversaba con ellas y oraba por ellas.
En la obra de Francisco Cândido Xavier se manifiesta un profundo respeto por la Naturaleza, promoviendo un cambio en la realidad que nos rodea desde el discernimiento, la ética y el respeto por la vida. Tal y como podemos apreciar en el libro Agenda Cristiana (7), Capítulo 35, nos dice:
«El Sol brilla arriba para ayudar a todos.
Las estrellas están agrupadas en orden.
El cielo tiene tiempos de luces y de sombras.
El vegetal sale del hoyo oscuro, aunque permanece unido al suelo, buscando luz, para poder producir.
La rama que sobrevive a la tormenta cede su paso permaneciendo, sin embargo, en el lugar que le corresponde.
La roca garantiza la vida en el valle, al resignarse a la soledad.
El río logra sus objetivos porque aprendió a mover obstáculos.
La siembra siempre rinde, según los propósitos del sembrador.»
Nosotros, Espíritas en progreso, escuchemos este hermoso mensaje… practiquemos y sembremos respeto hacia lo que nos rodea, hacia todo ser que conforma este mundo de pruebas y expiaciones que habitamos, necesario para nuestra Evolución y en camino hacia ese Mundo de Regeneración que anhelamos.
Referencias
Pitt SJ, Gunn A. The One Health Concept. Br J Biomed Sci. 2024 Feb 15;81:12366. doi: 10.3389/bjbs.2024.12366. PMID: 38434675; PMCID: PMC10902059.
Mackenzie, J.S., McKinnon, M., Jeggo, M. (2014). One Health: From Concept to Practice. In: Yamada, A., Kahn, L., Kaplan, B., Monath, T., Woodall, J., Conti, L. (eds) Confronting Emerging Zoonoses. Springer, Tokyo.
Kardec, A. El Libro de los Espíritus. 1857.
Kardec, A. El Evangelio según el Espiritismo, 1864.
Xavier, F.C., Vieira, W., Espíritus varios. Ideal Espírita, 2° Ed. FEB.
Xavier, F.C., Espíritu André Luiz. Agenda Cristiana. Edicei of America, 2011.