Manifestaciones de los espíritus
Silver Chiquero
Obras Póstumas se constituyó a partir de manuscritos guardados por Allan Kardec en su residencia, entre material fragmentario, ensayos y verdaderos esbozos privados, reservados para un análisis más profundo, aguardando la indispensable madurez de los temas y eventual mejora y corrección de los textos. Al no ser publicados estando él encarnado, queda patente el buen sentido, la lógica, el celo, la prudencia y la humildad de Allan Kardec y con ese sentido crítico, madurez y serenidad se ha analizado el material.
Fue durante el Congreso Espírita y Espiritualista Internacional de 1890, cuando se tomó la decisión de publicarlo debido a los progresos científicos de aquellos últimos veinte años. Hoy, transcurridos más de 160 años de la publicación de El Libro de los Espíritus, los fundamentos doctrinarios del Espiritismo siguen siendo intachables y actuales a pesar de todos los avances y conquistas de la Ciencia, verificadas a lo largo del tiempo.
La obra consta de dos partes, siendo la primera la consolidación y ampliación de los conocimientos del pentateuco, así como nuevos conocimientos que quedaron por evaluar; la segunda parte trata el futuro del Espiritismo y cómo dar a conocer a todos los niveles la doctrina a toda la Humanidad.
PRIMERA PARTE
Fe Espírita razonada
La fe Espírita es una fe razonada. Por ello, sabemos que Dios existe como inteligencia suprema y causa primera de todas las cosas, porque a través de la Ciencia y nuestro intelecto deducimos que no hay efecto sin causa; que Dios es eterno, inmutable, inmaterial, único, omnipotente, soberanamente justo y bueno e infinito en todas sus perfecciones; que Dios es el creador de todas las cosas cuyo principio forma parte de Sus secretos.
Manifestaciones de los Espíritus
Los Espíritus actúan sobre la materia inerte mediante el periespíritu y producen los diversos fenómenos mediúmnicos que se han producido en todas las épocas y países, conociéndose ya en la antigüedad el medio de provocarlas por un reducido grupo de iniciados que lo escondían del vulgo para dominarles por el prestigio de ese “poder oculto”.
> El periespíritu como principio de las manifestaciones
Mediante algunos fluidos el periespíritu puede hacerse perceptible, bien por condensación o bien por alteración en la disposición molecular; por el fenómeno de la transfiguración el Espíritu combina sus fluidos con los de otro individuo pudiendo dar a un semblante feo, uno bonito y radiante.
> Emancipación del alma
Durante el sueño el cuerpo descansa, pero el Espíritu no duerme, va a donde quiere por el mundo terrenal, pero nunca se separa completamente del cuerpo gracias al lazo fluídico, que le recuerda volver cuando es necesario.
> Aparición de personas vivas. Bicorporeidad
El alma puede dar origen a fenómenos análogos a los de un Espíritu desencarnado, con una apariencia tan idéntica a la realidad que muchas personas afirman haberlo visto en dos lugares diferentes.
> Médiums
Los médiums son personas aptas para sentir la influencia de los Espíritus, quienes no sólo pueden transmitir sus pensamientos, sino también llegar a influir físicamente y hacerlo actuar o hablar a su voluntad.
> Obsesión y posesión
Con la mediumnidad, los enemigos ocultos aparecieron en escena, siendo para ellos como el microscopio que reveló todo un mundo. En el “combate Espíritu a Espíritu” sigue ganando el más fuerte, aplicando sobre el obsesor su autoridad subordinada a la superioridad moral. Para el obsesado puede ser una tarea impuesta para trabajar en la regeneración del obsesor, como un padre trabaja para la recuperación de un hijo viciado.
Hombres dobles. Aparición de personas vivas
Conociendo la propiedad de condensación del periespíritu, que permite hacerse visible bajo apariencias corpóreas a los médiums videntes y en ocasiones a otras personas, no podemos poner en duda la posibilidad del fenómeno de la ubicuidad. El alma encarnada, cuanto más adelantada, más libre se encuentra por su desprendimiento más completo, teniendo percepciones especiales inherentes a su estado.
Causa y naturaleza de la clarividencia sonambúlica
El sonámbulo ve gracias a todo su ser moral, por toda su alma, así como la luz es uno de los atributos de todas las partes del fósforo.
Segunda visión
La segunda visión se da, según el desarrollo moral, en múltiples grados, partiendo de cierta perspicacia y seguridad en los actos, despertar presentimientos, ver hechos ocurridos o por suceder, si bien en su apogeo es el despertar del éxtasis. Pudiendo darse el fenómeno de manera natural o espontánea, en tiempos de crisis, calamidades o grandes emociones, provocan su desarrollo multiplicando la facultad de prever los hechos.
Fotografía y telegrafía del pensamiento
La extensión de la irradiación puede alcanzar distancias infinitas a nuestra voluntad, dilatando el fluido como el calor dilata los gases, atmósferas que se entrecruzan y mezclan sin confundirse, como las ondas sonoras que se conservan distintas, siendo cada individuo el centro de la onda fluídica. Puede influirnos sintiendo como algo en el aire presagiando tal o cual acontecimiento. Dándose la acción recíproca de unas inteligencias humanas sobre las otras, imaginad el poder incalculable de esa fuerza compuesta de tantas fuerzas reunidas, mediante la voluntad y actuando armónicamente para alcanzar un único objetivo: el progreso universal.
La naturaleza de Cristo
> Fuentes de las pruebas de la naturaleza de Cristo
La divergencia de opiniones sobre la naturaleza de Cristo dio origen a la mayoría de sectas que dividieron la iglesia hace dieciocho siglos, con opiniones formadas más sobre abstracciones que sobre hechos, destacando lo plausible o irracional en lugar de señalar los hechos capaces de dar una luz decisiva sobre la cuestión.
> Los milagros prueban la divinidad de Cristo
Ahora que la Ciencia investiga las Leyes de la Naturaleza hay más incrédulos que creyentes en los milagros, pero los descubrimientos de la Ciencia situaron en el dominio de lo natural muchos efectos calificados de prodigios; en su mayoría los hechos citados y operados por Jesús se encuentran hoy totalmente demostrados por el Magnetismo y por el Espiritismo como fenómenos naturales.
> Las palabras de Jesús prueban su divinidad
El dogma de la divinidad de Jesús se basó en la igualdad absoluta entre su persona y Dios, lo cual es un artículo de fe, sin embargo, destacan la dualidad de las personas, así como el estado secundario y de subordinación de Jesús con relación a Dios. Jesús confirma y reconoce su inferioridad con relación a Dios situado por encima por su poder y sus cualidades morales; la verdad que aprendió vino de Dios, siendo Él su enviado, su mesías y su subordinado, por lo tanto Jesús no es Dios.
> Palabras de Jesús después de su muerte
Leyendo las palabras de Jesús nos preguntamos cómo habrá llegado a la mente de alguien la idea de atribuirles un sentido diametralmente opuesto al que ellas destilan tan claramente. Sólo una doctrina puramente especulativa nacida tres siglos más tarde, de una polémica trabada sobre la naturaleza abstracta del Verbo, prevaleció por la presión de un poder civil absoluto.
> Doble naturaleza de Jesús
La subordinación de Jesús queda reflejada incluso por su calidad de mediador, que intercede junto a su Padre y se ofrece en sacrificio para la remisión de los pecadores, lo que implica la existencia de una persona distinta.
> El verbo se hizo carne
La cuestión de la divinidad de Jesús apareció gradualmente, de las discusiones levantadas a propósito, de las interpretaciones que algunos dieron a las palabras Verbo e Hijo, resultando ese dogma de la decisión de los hombres, no de una revelación divina. Jesús era un mesías divino porque su misión procedía de Dios y sus perfecciones lo situaban en relación directa con el Padre.
> El hijo de Dios y el hijo del hombre
Lo llaman Hijo único porque era el único predestinado a desempeñar aquella misión en la Tierra. Durante esa interminable polémica que apasionó a los hombres durante siglos y aún continúa, se apegaron a la afinidad de Jesús con Dios, pero silenciaron la relación a las virtudes que Él recomendó y ejemplificó. El propio Dios fue eliminado ante la exaltación de la personalidad de Cristo.
Influencia perniciosa de las ideas materialistas
Las preocupaciones de orden material se sobreponen a los cuidados artísticos, realizándose los mayores esfuerzos para concentrar todos los pensamientos del hombre en la vida carnal y para destruir en él toda esperanza, toda aspiración que avance en él la existencia actual. Así como el arte cristiano sucedió al arte pagano, el arte espírita será el complemento y la transformación del arte cristiano. Sin duda, el Espiritismo abre al arte un campo enteramente nuevo, inmenso y todavía inexplorado.
Teoría de la belleza
La pobreza, en todos los tiempos y bajo todos los aspectos, nunca fue bella y no lo es, justamente, para avergonzarnos y forzarnos un día a liberarnos de ella. “Más adelantados también en bondad, vuestros descendientes harán de esta infeliz Tierra lo que no supisteis hacer: un mundo feliz donde el pobre no será repelido ni despreciado, sino socorrido por vastas y liberales instituciones. Hay tantas armonías como objetos creados y el elemento que reúne todas las armonías de la especie posee la mayor suma de belleza que la especie pueda alcanzar. Nos aproximamos cada vez más a la belleza real, a medida que nos acercamos más a la perfección.” (Lavater)
Música celestial
El sonido de vuestros instrumentos, de vuestras más bellas voces no os podrían dar la menor idea de vuestra música celestial y de su suave armonía. Los espíritus buenos, encontrando al Espíritu dócil a sus enseñanzas, se complacen en instruir como hace el profesor con el alumno al que encuentra con buena disposición.
Música espírita
El Espíritu produce los efectos musicales actuando sobre el éter, sobre el fluido universal que reproduce lo que éste concibe y desea. La música es el médium de la armonía, ella la recibe y la da, como el reflector es el médium de la luz, como somos el médium de los Espíritus. La armonía es tan indefinible como la felicidad, el miedo, la cólera: es un sentimiento, sólo puede comprenderla quien la posee y sólo puede poseerla quien la ha adquirido.
El camino de la vida
La existencia espiritual del alma es su existencia normal, con indefinido recuerdo retrospectivo. Si en vidas pasadas tuvimos un defecto del que ya no conservamos vestigio, ahí hay una cuenta saldada con la que no nos debemos preocupar más; pero si el defecto queda parcialmente corregido, el restante quedará para la siguiente vida, debiendo a nosotros corregirlo en la siguiente ocasión.
Muerte espiritual
Durante la reencarnación, las facultades del Espíritu no quedan entorpecidas como en un sueño momentáneo, sino en estado de latencia; conviene que algunas queden en reposo para que otras se desarrollen. Así quien fue artista, en una nueva existencia podría ser un sabio, estadista, o estratega en otra, siendo nulo desde el punto de vista artístico y recíprocamente. Todas las facultades y aptitudes se encuentran en germen en el Espíritu, como el salvaje que más tarde será un hombre civilizado posee los gérmenes que un día harán de él un gran artista o un gran filósofo. A medida que el Espíritu se engrandece, la Naturaleza provee de los instrumentos necesarios.
La vida futura
La vida futura debe ser presentada bajo el aspecto de algo positivo, en cierto modo tangible, capaz de soportar cualquier examen, satisfaciendo la razón sin dejar nada en la sombra, para ser aceptada por la opinión general y para que ésta ejerza su acción moralizadora. Cuando se vea el presente reaccionar sobre el futuro y comprender la reacción del futuro sobre el presente, sus ideas cambiarán completamente porque se verá en la vida futura no sólo un fin sino un medio; no un efecto distante sino actual, ejerciendo una acción preponderante sobre el estado social y sobre la moralización de la Humanidad.
Expiaciones colectivas
La reencarnación en el mismo medio es la causa determinante del carácter distintivo de los pueblos y de las razas. Ciertas convulsiones sociales resultan siempre una mejora; los Espíritus se esclarecen por la experiencia; el infortunio es el estimulante que los impele a buscar un remedio al mal; y así de generación en generación se efectúa el progreso. Los miembros de una individualidad colectiva son solidarios en el bien y en el mal que practican en común. La reforma seria y radical de las imperfecciones modificando y despojándonos de las pasiones malas, adquiriendo día a día nuevas cualidades, enseñando a todos con el ejemplo llevará solidariamente a todos los hombres a la felicidad, por la fraternidad, por la tolerancia, por el amor.
El egoísmo y el orgullo
El egoísmo y el orgullo nacen de un sentimiento natural: el instinto de conservación. La caridad y la fraternidad resumen todas las condiciones y todos los deberes sociales. El ser comprende que por sí solo nada es y nada vale, que nos necesitamos los unos a los otros y no son más los unos que los otros. ¿Qué podrá llegar a pasar cuando toda una generación sea alimentada con buenos ideales? Las instituciones se reformarán y la Humanidad avanzará hacia los destinos prometidos de la Tierra.
Libertad, igualdad, fraternidad
Fraternidad significa devoción, abnegación, tolerancia, benevolencia, indulgencia; es por excelencia la caridad evangélica. La libertad presupone confianza mutua. La fraternidad no se puede practicar en toda su pureza excluyendo la igualdad y la libertad. Eliminad de las leyes, de las instituciones, de las religiones, de la educación hasta los últimos vestigios de los tiempos de barbarie y de privilegios, las causas que alimentan y despliegan estos eternos obstáculos al verdadero progreso.
Las aristocracias
La primera aristocracia proviene de la existencia de hombres incapaces que necesitan ser dirigidos; la segunda aristocracia vino de la autoridad de la fuerza bruta; la tercera aristocracia vino de la división de la sociedad en dos clases; la cuarta aristocracia vino del mantenimiento de privilegios, siendo necesario darles prestigio de legalidad; la quinta aristocracia se erigió sobre una nueva potencia, la del dinero, con el que se dispone de los hombres y de las cosas; la sexta aristocracia vino de la pérdida del prestigio moral sobre el dinero, teniendo que ser sustituida por la de la inteligencia. La última aristocracia, que llamaremos aristocracia intelecto-moral, vendrá como señal de Adviento del reinado de bien en la Tierra, vendrá de la unión de la inteligencia y la moralidad necesarias para crear una preponderancia legítima a la que las masas se someterán ciegamente, porque inspirarán plena confianza por sus luces y por su justicia.
Los desertores
Espíritas, si queréis ser invencibles, sed benévolos y caritativos; el bien es la coraza contra las maniobras de la malevolencia. La divulgación universal del Espiritismo es una cuestión de tiempo y en este siglo el tiempo marcha a paso de gigante. Las resistencias inconscientes o simuladas, los ataques tratando de sembrar el descrédito y el ridículo, se vuelven elementos que garantizan la estabilidad del Espiritismo.
Rápida respuesta a los detractores del espiritismo
El Espiritismo es el resultado de miles de observaciones realizadas sobre todos los puntos del globo y que convergieron en un centro que las recolectó y coordinó, propagándose por sí mismo y por las simpatías que inspiró, a todos los lugares y capas sociales desde arriba hacia abajo de la sociedad. El Espiritismo es una doctrina filosófica con consecuencias religiosas como cualquier filosofía espiritualista, siendo sus bases: Dios, el alma y la vida futura; proclama la libertad de conciencia como derecho natural; su máxima es que la fe incontestable puede enfrentarse cara a cara en todas las épocas de la Humanidad.
Nota del articulista: La intención de este artículo es destacar los puntos que, a modo de selección personal, he considerado de especial interés. Si además de su lectura consigo crear el sano interés por conocer Obras Póstumas en toda su extensión, mucho mejor para la Humanidad.